Me reencuentro con este espacio de reflexión, quizás un tanto antiguo, pero por otro lado bastante más romántico que otros.
Estaba tomando contacto con el libro las venas abiertas de América Latina, de Galeano, donde explica y va enumerando los diferentes rumbos económicos que ha tomado la región. Obviamente en detrimento de si misma, cosa que es bastante extraña, pero por otro lado no escapa a la lógica capitalista.
La historia cuenta un poco cómo los gobiernos que tomaban "proteccionismo aduanero" para cuidar sus incipientes industrias eran destrozados por medidas bélicas o golpes de estado para favorecer las industrias, en aquel entonces, de bandera Inglesa.
Los hechos que narra el libro, en esta parte hablamos de aproximadamente 1830, tienen una espeluznante semejanza a los tiempos actuales.
En épocas de dictadura militar; en las radios aparecían propagandas alentando al consumo de productos importados de "mejor calidad". Que eran importados con bajos impuestos para destruir la industria nacional. Cosa que 130 años atrás pasaba con los ingleses, que vinieron a "recorrer" y se llevaron de "muestra": cuchillos, facones, ponchos, espuelas y herramientas de uso tradicional para producirlas y venderlas luego aquí a menor precio. Pues su industria era más aceitada que la de Argentina de aquel entonces.
El releer un poco de nuestro pasado, quizás nos haga entender un poco el presente. Porque cambian los nombres, pero las situaciones son las mismas.
coincido que hay muchas semejanzas entre lo que relatás y lo que ocurre hoy con los mismos sectores que ya se repartieron la tierra y las riquezas de todos los argentinos y de los países hermanos de latinoamérica pero que parece no les alcanza, quieren más y van por más. Duele ver que uno está desarmado ante los poderes económicos que son los grandes responsables de muchas de las miserias en el mundo entero... Me quedo dando vueltas por el blog... Abrazo
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